¡Sean bienvenidos a la que muchos consideran la ciudad más bonita de Croacia!
Split es la segunda ciudad más habitada del país, sólo detrás de su capital, Zagreb. Es también la capital de la región de Dalmacia, una de las regiones más turísticas y hermosas de Croacia.
Los puntos de interés que ver en Split son muchos. Sin embargo, su atracción más importante es el antiguo Palacio de Diocleciano, una enorme área rodeada de murallas, donde en su interior conviven hoy el pasado y el presente.
Por su impresionante centro histórico, sus barrios linderos y más razones, muchos la encuentran más atractiva que la famosa ciudad de Dubrovnik.
Al final de esta guía encontrarás un mapa con todos los lugares recomendados que ver en Split. Podrás llevarlo en tu smartphone y usarlo allí para ubicar cada sitio.
¡Asegúrate de leer hasta el final!
La elección de la zona donde dormir en Split va a depender de factores como: cuántos días estarás allí, si viajas en auto, tu presupuesto, etc.
Para nosotros la zona ideal es el centro histórico, ya que es donde se encuentran la mayoría de las atracciones de la ciudad, a una distancia corta una de otra.
ALOJARSE EN EL CENTRO HISTÓRICO DE SPLIT
Pros: es la mejor ubicación, cerca de los principales lugares de interés. Aquí se siente mejor la historia de Split.
Contras: en temporada alta puede ser difícil encontrar disponibilidad y buenos precios. Además, si viajas en auto, tendrás que buscar un parking fuera y caminar con las maletas hasta allí.
Te recomendamos leer nuestra reseña de Apartments Salvezani, el alojamiento que elegimos para pasar 2 noches en Split. Se encuentra dentro del área del Palacio de Diocleciano, en una antigua casa construida hace miles de años.
¡Súper recomendado!
ALOJARSE FUERA DEL CENTRO HISTÓRICO DE SPLIT
Pros: pueden llegar a encontrarse mejores tarifas. Si viajas con auto, hay más probabilidad de conseguir un hotel con parking.
Contras: estar alejado del centro histórico y perderse la vida nocturna dentro del Palacio de Diocleciano.
Recomendamos las zonas de Veli Varos y la Colina Marjan. Están muy cerca del centro histórico y hay buena oferta de alojamientos tipo Bed & Breakfast.
Como hemos dicho, el lugar de interés más importante que ver en Split es el Palacio de Diocleciano.
Pero, ¿qué es y qué hay dentro?
El Palacio de Diocleciano fue construido entre los siglos III y IV por orden de Diocleciano, emperador romano de ese entonces que decidió pasar sus últimos días de vida en el Palacio.
Cubría un área de 160 x 190 metros y en su interior podían caber hasta 9.000 personas. Lo que vemos hoy son las ruinas del imponente Palacio, aunque muchas partes están bien conservadas.
Hoy en día, dentro del área del Palacio de Diocleciano conviven edificios antiguos, ruinas, comercios y viviendas. Esta combinación conforma un núcleo histórico impresionante que maravilla a quienes lo visitan.
La entrada general al Palacio es gratuita y libre, aunque para ciertos lugares hay que abonar un ticket. Se puede acceder durante todo el día, salvo los lugares pagos que tienen un horario.
¡Sigue leyendo hasta el final para conocer todo lo que hay que ver en Split!
El Palacio de Diocleciano cuenta con 4 puntos de acceso principales:
La Puerta de Oro, la Puerta de Plata, la Puerta de Hierro y la Puerta de Bronce.
La Puerta de Oro se encuentra en la parte norte del Palacio. Fue por esta puerta por donde Diocleciano entró a su Palacio por primera vez, en el año 305.
A través de esta puerta se tomaba el camino que conducía a Salona, la antigua capital de Dalmacia.
La Puerta de Plata era conocida también como Puerta Orientalis, por su ubicación al este. Fue reconstruida en el año 1952, luego de la demolición de una iglesia barroca que se encontraba en el lugar.
Al entrar por la Puerta de Plata, caminarás por el pavimento original por donde caminaban los súbditos del Emperador.
La Puerta de Hierro se ubica al oeste. Es una de las más importantes del Palacio, ya que es la única que funcionó de forma ininterrumpida durante 17 siglos.
Por último, la Puerta de Bronce o Puerta Aenea. Su tamaño reducido en comparación de las otras se debe a que su función era conectar los sótanos del Palacio con el mar.
Esta última es la más utilizada por los turistas, que inician su recorrido por el Palacio a través de ella.
La Plaza del Peristilo es la plaza principial del Palacio de Diocleciano.
Se encuentra rodeada de monumentos religiosos, templos y antiguos palacios que pertenecían a las familias nobles de Split en la antigüedad.
En la actualidad, la Plaza del Peristilo se utiliza también como escenario para obras de teatro al aire libre y óperas clásicas.
Las columnas de granito rojo a los lados de la plaza nos guían hacia la entrada principal de los vestíbulos y sótanos del Palacio de Diocleciano.
Estos son, sin dudas, dos de los lugares más interesantes que ver en Split.
El Vestíbulo era la entrada principal a los antiguos Salones Imperiales.
Desde la Plaza del Peristilo, y a través del Vestíbulo, se ingresaba a la parte residencial del Palacio de Diocleciano. En el camino, se encuentra una enorme cúpula abierta, de forma circular.
Los sótanos del Palacio de Diocleciano han cumplido distintas funciones a lo largo de la historia.
Se construyeron originalmente para “elevar” los Salones Imperiales que se encontraban en la parte superior y también para servir como almacenes.
Con el correr del tiempo, y a medida que se comenzaron a construir viviendas sobre las ruinas del Palacio, los sótanos se convirtieron en una gran fosa donde se arrojaban los desechos.
Por desgracia, los antiguos Aposentos Imperiales ya no existen.
Sin embargo, según los historiadores, y por su función estructural, los sótanos representan una réplica fiel y nos ayudan a imaginar cómo eran estos grandes Salones de la parte superior del Palacio.
Ubicada en el lado este de la Plaza del Peristilo, se ubica la Catedra de Split, o Catedral de San Duje. Se trata ni más ni menos que de la Catedral más antigua de Europa.
Su aspecto es un tanto inusual para el de una Catedral: tiene una forma octogonal, rodeada de 24 columnas, y su tamaño es pequeño en comparación de otras Catedrales europeas.
Esto es porque, en sus orígenes, este edificio era un Mausoleo. Se convirtió en Catedral durante el siglo VII, mucho después de la muerte de Diocleciano.
Debajo de la Catedral de San Duje se encuentra una antigua Cripta, la cual se puede visitar.
A un lado, se ubica el Campanario una enorme torre de 57 metros de altura desde donde se tienen muy buenas vistas del centro histórico de Split.
La versión que vemos hoy de la torre del campanario es una reconstrucción hecha entre los siglos IX y XX. La torre original fue construida en el siglo XVIII.
Completando el complejo religioso y de monumentos históricos cercanos a la Plaza del Peristilo, encontramos el Templo de Júpiter.
Se encuentra a unos pocos metros de la Catedral de San Duje, casi escondido entre antiguas casas y calles estrechas.
Frente al templo, se pueden observar un pórtico de seis columnas y una esfinge egipcia, llevada a Split en la época de Diocleciano.
Justo del lado izquierdo del Templo de Júpiter, se encuentra una calle extremadamente estrecha conocida como calle “Let me pass” (o “Déjame pasar”).
Es tan angosta que sólo puede pasar de a 1 persona por vez.
Ubicada en los jardines frente a la Puerta de Hierro, se encuentra esta gran estatua en honor a uno de los obispos más importantes de la historia de Croacia.
Como en tantas otras estatuas del mundo, sobre ella también recae un mito popular. Se dice que si frotas uno de sus dedos del pie izquierdo, atraerás la buena suerte.
Más allá de toda superstición o creencia, lo cierto que esta estatua y los jardines frente a la Puerta de Herro son otros de los lugares de interés que ver en Split.
La Plaza del Pueblo es una de las más antiguas e importantes de Split.
Fue una de las primeras zonas que se habitó en la ciudad, fuera del Palacio de Diocleciano. Allí residían, hace siglos, importantes familias Nobles de Split.
En la Plaza del Pueblo se encuentran varios edificios históricos, como la librería Morpurgo (una de las más antiguas del mundo), el City Café y el Antiguo Ayuntamiento.
Sin dudas, es una de las Plazas más bonitas que ver en Split.
La Plaza de la Fruta se ubica junto en el límite oeste del Palacio de Diocleciano, cerca del paseo marítimo de la Riva.
Es una zona animada y pintoresca, rodeada de casas antiguas y comercios. Allí pueden encontrarse varios cafés y restaurantes para comer o beber algo y descansar un momento.
Esta plaza es mucho más nueva que las otras que se encuentran distribuidas por el centro histórico de Split.
Fue construida durante el siglo XIX y su diseño tiene una clara influencia veneciana. De hecho, su aspecto es similar a la Plaza de San Marco de Venecia, con edificios de colores sobre extensas columnatas.
Se encuentra justo en el límite entre el centro histórico y el antiguo barrio de Veli Varos, casi como separando uno de otro.
La Riva es un paseo peatonal frente a las aguas que bañan Split. Fue construido durante las invasiones napoleónicas, por fuera de las murallas del Palacio de Diocleciano.
Su extensión cubre toda la longitud del Palacio y llega hasta la Plaza de la República. Es una de las zonas más visitadas por los turistas y una de las partes infaltables que ver en Split.
Lo mejor es caminar hasta el puerto y ver las hermosas vistas de la Riva y el Palacio de Diocleciano de frente, al atardecer. También, elegir alguno de los cafés y restaurantes para cenar o tomar algo.
Marmontova Ulica es una de las calles principales de la ciudad. Es una larga vía peatonal que comienza en la Riva y separa el centro histórico de la Plaza de la República.
A lo largo de Marmontova Ulica, se puede encontrar de todo: decenas de comercios, un mercado de pescados justo en la mitad y hasta importantes marcas de moda.
Al final de la calle, frente a una plaza, se encuentra el llamativo Teatro Nacional. Su fachada colorida contrasta con lo sobrio de los históricos edificios de piedra que se encuentran en el centro histórico.
El área de la colina Marjan se encuentra dentro de un gran parque de 3 km de extensión, sobre el extremo oeste de Split.
Es el espacio verde más grande de la ciudad, donde se pueden hacer caminatas al aire libre en alguno de sus trails, subir y bajar largas escaleras y tomar un descanso rodeado de naturaleza.
Dentro del parque pueden encontrarse algunas iglesias y varios bares y cafés.
El punto más alto de la colina Marjan es llamado “Telegrin”, tiene unos 178 metros de altura, y es un punto ideal para tener una vistas espectaculares de Split.
A los pies de la colina Marjan se encuentra Veli Varos, uno de los barrios más antiguos de Split.
Se lo conoce como “El barrio de los pescadores”, porque fue fundado por pescadores que en la antigüedad eligieron esta zona para establecer sus viviendas.
Sus tranquilas calles, casi vacías, contrastan con la intensa actividad que se vive en el centro histórico.
Si bien no podemos asegurar que Split sea la ciudad más bonita de Croacia, sin dudas es fascinante. Si viajas a este espectacular país, no dejes de pasar por Split.
¡Esperamos que te sorprenda tanto como a nosotros!
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